Venir a Madrid es fotografiarte en el kilómetro cero (si puedes encontrarlo entre los turistas), pasear por la Gran Vía o recorrer los bares de calamares de la Puerta del Sol. Sí, pero también es mucho más. Sal de los circuitos típicos de los turistas y descubre una cara diferente del centro en tu próximo visita.

Para ello te propongo varios planes en Madrid con los que disfrutar de la ciudad como si fueras un auténtico gato. Lo primero es encontrar donde alojarse. Mis hoteles en Madrid favoritos en estos momentos no pueden tener una mejor ubicación: la Plaza Mayor, la antigua Casa de la Carnicería donde hasta hace poco estaban las delegaciones del Ayuntamiento de Madrid y se celebraban las bodas civiles, y Plaza de España, donde se encuentra el hotel con la mejor terraza de toda la ciudad. Vistas 360º sobre Madrid que te harán ver la ciudad de otro modo.

Ahora que tienes el puesto de mando en pleno centro de la capital, es hora de moverse por sus calles. Para empezar vamos con un buen desayuno. Mi primera opción para un sábado por la mañana es acercarme a Santa Eulalia, una cafetería pastelería que saca la parte más dulce de mi. No te pierdas los zumos, las tostadas y sus brioches, son magia en la boca.

Desde allí tienen todo el centro a pocos pasos. Deambula por las calles cercanas a la Plaza de Ópera para ver la vida del Madrid de Los Austrias: el Espejo, el Lazo, la calle Cruzada, las calles de Santiago, con su iglesia, tabernas y terrazas… En tu paseo, además de ir al Teatro Real (merece la pena hacer una visita guiada), entra en algunos de los locales del barrio, espacios llenos de encanto y donde no encontrarás camisetas con el letrero “de Madrid al Cielo” o gitanillas de cerámica.

Mis favoritos son Fransen et Lafite, una floristería donde además hay objetos de decoración, velas, fragancias para la casa… Un local que merece la pena descubrir. Unas calles más allá hay dos librerías en las que pasar un buen rato. Si vienes a Madrid con niños pasa por La Mar de Letras donde Clara te hará recomendaciones sobre qué comprar. Si pasas por allí por la tarde no te pierdas los talleres gratis que hacen para niños muchos sábados que te darán una hora para disfrutar de la zona mientras los peques lo pasan bien entre libros y manualidades. También está La Buena Vida Librería, situada junto a uno de los accesos que tenía la muralla, muy cerca de la plaza de Ramales.

Atraviesa la Plaza de Oriente para llegar a Palacio donde, además de la visitas interiores, los miércoles y sábados hay un vistoso cambio de guardia. Justo al lado está la catedral de la Almudena. Una vez dentro, no te olvides de subir a la cúpula, una parte a la que puedes acceder con la entrada al Museo. Y antes de comer ¿un paseo el Campo del Moropor ? Un jardín de reyes situado a espaldas de Palacio y que llega hasta Madrid Río donde, muy posiblemente, podrás encontrar alguno de los pavos reales que viven en el parque.

Madrid Río es otro de los atractivos de la ciudad. Un paseo a orillas de lo poco que queda del Manzanares que es ha convertido en zona de encuentro para hacer un poco de deportes, pasar horas en familia o disfrutar de la cultura en lugares como Matadero Madrid, un lugar al que siempre hay que ir por sus exposiciones, mercadillos y espacios multiusos.

Planes en Madrid: Comer, tapas y pinchos

En este caso te propongo que huyas del mercado de San Miguel donde solo se centran turistas. En la zona centro hay otros mercados donde poder tapear comprando la comida en los puestos por la mitad de dinero y en un ambiente local. Puedes elegir entre los mercados de San Fernando (Lavapiés), La Cebada (La Latina), San Antón (Chueca), San Ildefonso (Fuencarral), Antón Martín (Antón Martín cerca del cine Doré). En cualquier de ellos el ambiente te gustará, la comida está estupenda y el precio no te hará un agujero en el bolsillo.

Otra zona en la que hacer un alto es La Latina, en el triángulo entre las cavas, la plaza de la Paja y San Francisco. En esta zona hay mucha variedad de tabernas, bares y restaurantes por lo que saber elegir es fundamental. Aquí te hago un listado de mis favoritos.

• Juana la Loca, con un pincho de tortilla que quita el sentido
• Taberna Tempranillo, vinos y pinchos para disfrutar
• Casa Lucas, buena recomendación de vinos y un tapeo que te hacer perder el sentido (no te vayas sin probar las croquetas)
• Astor Gastro, un restaurante con una carta pequeña pero deliciosa
• El Viajero, tapas, raciones y copas. No te pierdas la terraza, un lugar de encuentro mítico de Madrid.
• Y la Plaza de la Paja… donde hay tanto donde elegir. Desde sitios para comer/cenar a espacios para merendar o tomar una copa. No te olvides pasar por Cocool, un espacio de productos artesanales de calidad donde querrás comprar todo.

Si aún te quedan ganas de pasar una noche divertida pasa por Lavapiés. Los locales de la calle Argumosa siempre están animados: La Buga del Lobo, El Automático, La Playa de Lavapiés, O Pazo de Lugo, La Caníbal, Lobamanola… Tendrás dudas sobre cuál elegir. Y para terminar la fiesta sube a la plaza de Tirso de Molina a darlo todo en Medias Puri. Esto sí que es disfrutar de Madrid.

Imágenes: Madrid.es, Catedral de la Almudena y Unsplah

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