Cayó en mis manos por casualidad. Pero sabía que, un libro que ha esperado 20 años a ser publicado por Rafael Chirbes, tenía que estar en mi biblioteca. Su último libro, Paris-Austerlitz, ese en el que cuenta una historia de vida, amor y muerte.

“Pero cuando llegaba el momento de la despedida, se plantaba inmóvil ante la puerta y fijaba en el vacío aquellos ojos amarillentos que es el encharcado los dos sabíamos que la tregua había concluido”

A través de la historia de un joven pintor viajamos a Paris-Austerlitz, donde el protagonista trata de abrirse paso entre sus sueños y alejado de la realidad burguesa en la que trata de sumirle su familia en España. Allí se inicia una historia de pasión, secretos, pasado y posesión entre dos hombres de diferentes procedencias, unidos por la atracción, el deseo, el sexo… Por lo que ellos, en algún momento, creen que es amor.

“Durante meses he llegado a creerme que mi ideal de vida coincidía con el suyo: envejecer juntos chapoteando en el pequeño estanque de los hábitos”.

Pero no se trata de un amor romántico, sino de una tabla de salvación para empezar a vivir, sin tapujos, con intensidad, toda la intensidad que, sus cuerpos y el alcohol, hacían posible.  Una vida que se torna en muerte con la llegada del sida (al que no nombra en ninguna de las páginas de Paris-Austerlitz) que agota al personaje hasta las últimas consecuencias.

“Me parecía que no había opuesto resistencia: y, al decir eso, no me refiero solo a poner medios físicos para librarte cómo usar preservativos y cosas así. Por aquellos días, no me quitaba de la cabeza la idea de que, en el fondo, el mal era expresión de una falta de ambición, e incluso de ausencia de orgullo”.

Una lectura que no deja indiferente por cómo expresa los sentimientos y el amor que une a dos hombres.

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